lunes, 10 de octubre de 2011

Política de Alianzas del ML (5/4/2010)

lunes 5 de abril de 2010


Políticas de Alianzas del ML

El pasado 26 de marzo, en reunión conjunta efectuada entre el Comité Ejecutivo y la nueva Fracción Legislativa, privó la tesis de incluir la negociación con el PLN como alternativa a los acontecimientos de mayo próximo, ampliando las opciones a la inicial decisión unilateral de la Presidencia (P) y el Comité Ejecutivo (CE) de acordar su exclusión, no solo para el Directorio Legislativo sino también para las próximas elecciones de Alcaldes. En ambos casos, la decisión de la P y el CE fueron tomadas sin consultar previamente a los nuevos diputados y regidores. Y esa, antes de cualquier otro asunto, es la primera variable que debe ser tomada en cuenta en esta cuestión. Más aún si se toman en cuenta algunos recientes antecedentes.

Pocos saben que, inmediatamente después de las elecciones, la P promovió la tesis de reformar los Estatutos internos para acabar con el poder de las Asambleas Cantonales para decidir y elegir las candidaturas a Alcaldes, con el argumento que era necesario debido a loos compromisos adquiridos, durante la campaña pasada, angunos cantones.

En esa ocasión, se le señaló a la P que esa reforma atentaría gravemente contra la dirigencia local, que no contaría con apoyo dentro de la Asamblea Nacional, que jurídicamente era improcedente (tal como se demostró con un posterior dictamen jurídico aportado por un militante del partido) y que, en cualquier caso, el camino adecuado sería que la dirigencia, regidores y Asamblea Cantonal acordaran lo que correspondiera y tales casos fueran elevados en esa condición a la Asamblea Nacional.

Por el contrario, la intención se tradujo en la creación de una Comisión por parte del CE, que nunca inició funciones, dada la firme oposición de algunos de nuestros nuevos diputados que, finalmente, hicieron valer su representatividad dentro de la Asamblea Nacional.

Tampoco son de conocimiento públicos otros acuerdos tomados por el CE que incluyó invitar a la dirigencia cantonal y provincial a explorar coaliciones de partidos políticos (excepto Liberación Nacional) para conformar equipos de trabajo, "de cara a las próximas elecciones de Alcaldes" y, promover una reunión de Presidentes y Secretarios "de los otros partidos políticos (excepto Liberación Nacional ) para analizar alianzas con la misión a la elección de Alcaldes".

Dicho acuerdo fue tomado casi veinte días antes que el TSE emitiera las resoluciones con los nombramientos de los regidores, es decir, para bien o para mal, de quienes sin saberlo asumirían las consecuencias inmediatas de su aprobación. Son más llamativos dichos acuerdos si se contrastan con los tomados, una semana antes, que incluyó motivar a los regidores electos, mantenerse "alejados de negociar mientras se termine el proceso de ratificación oficial por parte del TSE".

Es decir, por un lado, los nuevos regidores no podrían negociar en su entorno inmediato y urgente pero se verían afectados, inveitablemente, por las negociaciones del Presidente y la Secretaría General. Por otro, el acuerdo a la dirigencia para constituir equipos de trabajo para la elección de alcaldes se diluyó en un intrascendente correo electrónico informativo de la Secretaría General que, posiblemente, la mayoría de involucrados nunca ha conocido, los pocos que lo supieron ya ni se acuerdan y no haya nadie del CE que quiera traerlo a colación.

Mientras tanto, el Presidente y la Secretaría General se legitimaron dentro del propio CE para conversaciones de alto nivel para las elecciones de Alcaldes y el Directorio Legislativo, en nombre de todos, sin consultar a nadie, sin que el partido haya debatido esta cuestión, sin que la Presidencia, la Secretaría General y el Secretario de Finanzas hayan presentado sus obligados informes de la pasada campaña electoral y utilizando un capital político que, ciertamente, después de las elecciones, no representan y no les pertenece.

Por lo tanto, la primera cuestión que exige la definición de la políticas de alianzas del partido se refiere a la legititmidad de nuestra propia representación. Hoy, el ML no posee una única voz autorizada que lo exprese. En términos reales, cualquier negociación en la Asamblea Legislativa se traslada directamente a los nuevos diputados y, en las municipalidades, a los propios regidores libertarios, de tal forma que serán ellos, en su propio contexto, quienes tomarán sus propias decisiones. En la campaña pasada, todos ellos no tuvieron más remedio que enfrentarlas con sus propios recusos y organización, sin que hoy, como era de esperar, tengan o se sientan obligados a cerrar los ojos y, acríticamente, asentir a la palabra desgastada del Olimpo, mucho menos, en su propio detrimento.

Es falso que, por definición, la negociación de los libertarios con el PLN deba ser rechazada. El propio Presidente del Partido acudió a doña Laura argumentando áreas de interés común. ALgunas fuentes señalan incluso que de ese encuentro salieron algunos acuerdos, aunque no existe información pública para verificar su veracidad. En cualquier caso, por ejemplo, será cuestión de esperar los nuevos nombramientos en Juntas Directivas de instituciones públicas para verificar si, en esos casos, algunas pistas se materializan sobre esa cuestión.

A nivel legislativo, existe una mayor cantidad de temas en las que las opciones de negociaciones son mayores con el PLN que las que pueden asociarse con el PAC, el PUSC o el pASE que, de hecho, son los que con más diferencias tiene el ML. Algunos han señalado que no podríamos negociar con el PLN porque en campaña afirmamos que había sido el partido más corrupto en la historia. Pero no veo cómo desconocer que aliarnos con el PUSC sería hacerlo con el partido que igualó el record del PLN en un menor tiempo que, de paso, se olvidó decirlo en campaña, y que tiene a uno de sus expresidentes sentenciado penalmente y, otro, en juicio.

Se afirma, desde una visión general, que para el país es conveniente la existencia de un Directorio Legislativo de Oposición porque se corre el "riesgo de tener en Costa Rica un partido único por muchos años y cualquier oportunidad que la oposición tenga de recuperar espacios de pode del PLN debe aprovecharse". Pero la realidad del ML, después de las elecciones, no alcanza para un compromiso de esa naturaleza, muy lejano de las preocupaciones y espectativas actuales de los diputados libertarios mucho mñás interesados en, por un lado, dar continuidad a la agenda legislativa del partido y, por otro, en crear condiciones para dar respuesta a sus directo y propios electores, antes que embarcarse, sin velas, en la odisea de un directorio de oposición.

Es decir, preocupados por consolidar sus propios espacios antes que hipotecarlos de antemano en manos de quien no lo merece; sin capacidad orgánica de asumir las consecuencias políticas de, por ejemplo, tomar la iniciativa en la Comisión de Hacendarios para afectar significativamente el gasto públlico, incluyendo el surgimiento de contradicciones inevitables con sus presuntos aliados y asumiendo, como oposición, sin necesidad, las consecuencias de la conflictividad generada con dicha actitud.

Lo mismo sucede con nuestros regidores que deberán privilegiar la correlación de fuerzas en cada municipio, de cara al compromiso que asumieron con sus conciudadanos locales antes que imposiciones de la P o el CE. En San José, por ejemplo, de las 13 municipalidades en que resultaron electros regidores libertarios, en 8 de ellos representan el número que le hace falta al PLN para encabezar sus directorios, en algunos casos con administraciones municipales en manos de ese mismo partido, sin que se presuma que la proxima elección de alcaldes modificará esa realidad. No es baladí recordar que una mala decisión podrían arrastrarla durante los larguísimo seis años que les esperan y, en ese caso, ni la P ni el CE estarán condiciones de evitar o amortiguar las negativas consecuencias que puedan derivarse para sus carreras políticas y municipales.

Esa posición también se ve favorecida, paradójicamente, por consecuencias resultantes de la manera en que se consujo la campaña pasada del libertario. Es probable que la mayoría de los regidores electos del ML no hayan tenido oportunidad o acceso a la propuesta sobre descentralización y desarrollo local incluida en el Programa de Gobierno. Aislados en sus cantones sin que nadie se preocupara en acercarse a ellos para uniformar y legitimar las tesis programáticas, resulta natural que ahora enfaticen los problemas y entornos regionales, sin verse atados a ninguna conexión orgánica o ideológica con el partido, privilegiando sus propias necesidades de alianzas.

Lamentablemente, ni el P ni el CE tomaron en cuenta estas variables y, por el contrario, sin importar las consecuencias, han hecho todo lo posible, por un lado, por estrangular las condiciones de negociación de nuestros regidores y diputados y, por otro, ampliar las suyas propias para mantener, al menos, los reflectores públicos.

lunes, 15 de marzo de 2010

Denuncia ante Comité de Etica Movimiento Libertario

10 de marzo 2010
Srs. Tribunal de Etica

Partido Movimiento Libertario

(sello de recibido: 15 de marzo, 2010; 8.30 .m.)


Tomando en cuenta:

1- Que el señor Daniel Antonioo Quirós Araya (conocido como Danny), cédula número 205180399, es militante y miembro de la Asamblea Nacional del ML.


2- Que en la recientemente finalizada campaña electoral fue público y notorio que el Sr. Danny Quiros Araya fue "jefe de campaña", "coordinador de campaña", "jefe de comunicación y estrategia", "jefe de imagen", "jefe de imagen y comunicación" y "encargado de imagen".


3- Que durante dicha campaña la publicación electrónica Infierno.ticoblogger.com informó que "La ignorancia es un mal que hay que combatirlo con educación, en estos días hay más de un pobre idiota que trata de engañar a la gente con títulos falsos, uno de ellos es el Jefe de Campaña del ML Daniel Quirós Araya (o denominado Director de Imagen y Comunicación y conocido como Danny Quirós), que fue pillado por falsificar su título de bachillerato". Además, dicha publicación señaló: "Aquí tenemos una nota suscrita por Juan Felix Barrantes, Director de la División de Control de Calidad, donde se hace constar que el título es más falso que una aparición de la Virgen de los Angeles en un prostíbulo de San José. Qué patético para el Movimiento Libertario tener a ese pelele como su carta de presentación, que al no poder sacar la secundria, recurre a estas mierdas. Por eso, este país va en detrimento, tan corrupto es el que se roba harina como el que se falsifica tíitulos de secundaria". Se adjunta copia electrónica del presunto título de bachiller, divulgado por la mencionada publicación electrónica.


4- Que, según la misma publicación electrónica, la División de Control de Calidd y Macroevluación del Sistem Eductivo del MEP certificó en el 2005 que, en efecto, "según actas existentes en esta oficina la copia del título de Bachiller en Letras nombre de : Daniel A. Quirós Araya es falso por cuanto las citas de inscripción no corresponden a los registros de esta oficina, las firmas no son las de los funcionarios autorizados para ese efecto y los sellos no son los utilizados por esta División en el año 1997". Se djunta copia escrita de la presunta certificación, divulgada por la misma fuente fuente electrónica.


5- Que el artículo 359 del Código Penal señala "Será reprimido con prisión de uno a seis años, el que hiciere en todo o en parte un documento falso, público o auténtico o alterare uno verdadero, de modo que pueda resultar perjuicio"


6- Que el artículo 365 del mismo Código Penal señala: "Será reprimido con uno a seis años de prisión, el que hiciere uso de un documento falso o adulterado".


7- Que la divulgación de dicha denuncia ocasionó y ocasiona una grave lesión de los principios éticos y morales de Otto Guevara, Presidente y Candidato Presidencial en la campaña presidencia anterior del ML; de los integrantes, propietarios y suplentes del Comité Ejecutivo; de los diputados actuales y futuros de la fracción legisltiva libertaria; de todos quienes tienen responsbilidades dentro de la orgnización del partido, incluyendo a los propios miembros del Comité de ëtica; de todos los militantes y simpatizantes del Partido y los míos en particular, tal como se deriva de los comentarios que diversos ciudadanos hicieron en virtud de la denuncia ya mencionda, tal como a continuación reseño, obtenidos de la misma publicación electrónica (subrayados no son del original) (se djunta copia escrita).

a) "Esta vez el voto tiene que ser más meditado que nunca, porque lo nos estamos jugando es poder acostarnos en una Costa Rica y amanecer al día después de las elecciones todavía en una Costa Rica. Porque por un voto equivocado podemos irnos a la cama en Costa Rica y amanecer al día siguiente en Msaya, Puerto-Príncipe o Ciudad Juarez, todos lugares muy bellos, pero socialmente arrasadis y destruidos por la ferocidad y corrupción de sus clases dominantes y poderosas-ayudadas, claro está- por sus amiguitos de afuera.

b- Que desgracia con este montón de gente que trata de "agarrar una teta política" a como de lugar.

c-Este señor Quirós tras de estúpido es corrupto. Al señor Guevara le cae al pelo el dicho...dime con quien andas y te diré como eres!!!

d- Este 'zafis' solo sirve para hacer ver el tipo de personas de lsa que está rodeado Otto Guevara: su propio jefe de campaña es un tipo tan mediocre, que prefiere falsificar su diploma de colegio que ponerse a estudiar y ganárselo con honestidad.

e- Diay, el punto no es que no sepa gobernar porque un pelele de su partido no tenga el bachillerto, el punto es que si este mae lo hizo, probablemente haya más por ahí, y que el partido no se preocupa por indagar por la calidad laboral o académica de sus integrantes.

f- El bachillerato no es el asunto. Luis Ferrero, uno de los intelectuales más brillantes que ha tenido este país, no terminó el bachillerto. El asunto es la ética. Si hoy falsificás un documento legal siendo un güila, ¿qué putas harás mañana, cuando tengás el poder en tus manos?

g- Lamentblemente Quirós es quien dirige la imagen de Guevara, este zafis hace quedar mal al partido. Y no solo esto, el caso del candidato a diputado tercer lugar por la Provincia de Limón, que fué condendo por estafa, el caso del diputado Aguero...¿para qué putas en el Movimiento Libertario se las tiran de tan firmes contra la corrupción, hablan de mano firme y un montón de pendejadas más que no son capaces de cumplir ni siquiera a nivel interno? No me jodan.

h- Eso y otras cosas hablan mucho sobre el Movimiento Libertario

i- Imagínese lo que podría pasar en un gobierno....total tolerancia con los miembros del ML

j- Nuestra clase política es un mal chiste.

k- Si la información que el Chamuko presenta es totalmente verídica, no se debe dejar pasar algo así. Es imposible que los que pretenden gobernar nuestro país tengan el descaro de mofarse en nuestra propia cara y además de ello pedirnos el voto. Si el señor Quirós engaño para conseguir trabajo en el partido y algo en el posible gobierno, debe de renunciar y dar la cara. Y Otto debería dar las explicaciones del caso. Creo que esto amerita la presión necesaria para que sepamos la verdad y se sienten las responsabilidades. Buen trabajo del Chamuko.

l- El estratega del ML se dedica a leer el tarot y preguntarle a los astros (roger retana), el otro se dedica a robar títulos porque no le da el cerebro para pasar el mediocre examen de bachillerato...no sabía Otto de este acto de corrupción?...yo creo que sí pero se hizo el loco....cuantas lacras hay en este partido....la verdad yo creo que voy a votar nulo.

m- Si es capaz de hacer esas vras estando en un partido político de pacotilla ¿Qué no hará estando en un Gobierno?

n- ¿Ese es el equipo que llevaría Otto "el mripepino" Guevara al poder?

o- Toda esa manada de políticos ladrones valga la redundancia echados en un saco y lanzados a un río se envenenan los pececitos. Los Arias S´nchez-Calderón-Figueres Olsen-Miguel Angel Rodríguez roban en grande, Jettón Solís, Otto Guevara, Luis "secuestrado" Fishman y otros roban a escala media y el montón de pegabanderillas como ese muerto de hambre que falsificó el título en pequeñito ¡Todos son una absoluta porquería!

p- Si Danny tiene que purgar alguna culpa, ya lo hará en su momento y tras el debido proceso. Don Otto no va a poner objeción, porque es un hombre correcto".


8- Que en el artículo 5 de los Estautos vigentes del Partido Movimiento Libertario se señala que los "miembros afiliados...se comprometan a respetar y defender sus principios doctrinarios".


9- Que los Estatutos vigentes del Partido Movimiento Libertario reconocen, en su artículo 3, el derecho a la propiedad de todo individuo "adquirida honestamente" (inciso a), "bienes honestamente adquiridos" (letra a- del inciso b) y "obtenida honestamente" (letra c-del inciso b)


10- Que don Otto Guevra, Presidente del Partido y Candidato Presidencial de la anterior campaña del Partido Movimiento Libertario señaló expresamente que "TODO delito se persigue. El que la hace la PAGA" (mayúscula del original)


11- Que el artículo 31 de los Estatutos vigentes del Partido Movimiento Libertario señala que, entre otras, el Tribunal de Etica e Ideología del Partido tiene la facultad de "conocer y resolver todos los aspectos relacionados con el comportamiento ético e ideológico de los miembros del partido".


Por lo anterior, solicito que:


1- El Tribunal de Ética e Ideología conozca e investigue la verdad real de los hechos.


2- De corroborar la veracidad de las evidencis, el Tribunal de Etica e Ideología proceda a solicitar al Comité Ejjecutivo del Prtido Movimiento Libertario presentar la denuncia penal respectiva ante el Ministerio Público, conforme los citados artículos 359 y 365 del Código Penal.


3- Asimismo, de corroborar la veracidad de las evidencias, conforme el artículo 32 de los Estatutos del Partido, el Tribunal de Etica e Ideología acuerde recomendar al Comité Ejecutivo del Partido Movimiento Libertario, de acuerdo a los artículos 26, inciso ñ) y 31, incisos a) y b) de los mismos Estatutos, elevar a la Asamblea Nacional del Partido la expulsión del partido del señor Quirós Araya por su violación a los principios doctrinarios de los Estatutos del Partido y por las consecuencias de grave prejuicio causado a los principios éticos y morales del Presidente del Partido; de los integrantes, propietarios y suplenetes del Comité Ejecutivo; de los diputados actuales y futuros de la Fracción Legislativ Libertaria; de todos quienes tienen responsabilidades dentro de la organizción del partido, incluyendo a los propios miembros del Comité de ëtica; de todos los militantes y simpatizantes del Partido y los míos en particular, tal como se deduce del numeral 7) citado anteriormente.


Atentamente,


Walter Farah Calderón

Miembro de la Asamblea Nacional

Secretario General Suplente Comité Ejecutivo

Partido Movimiento Libertario


cc:

Comité Ejecutivo PML

Militantes y Simpatizantes

jueves, 25 de febrero de 2010

Estrategia, Gerencias y Comandos

El 20% obtenido en las votaciones presidenciales por el ML aumenta cuantitativamente su presencia en el escenario político. Sin embargo, a lo interno, es una derrota. En primer lugar, por la evolución misma de la campaña ya que, durante ella, se llegó al 30%. En segundo lugar, por los resultados obtenidos en diputados y regidores. En tercer término, porque no se logró la meta estratégica inicial. La mayor responsabilidad es de quienes condujeron la campaña electoral que, como corresponde, derivan de acciones de la Candidatura Presidencial, es decir, don Otto Guevara.

En diciembre del 2008 se conovocó a un grupo de personas para que analizara, definiera y ejecutara las líneas de acción estratégicas para la campaña electoral. Ese grupo se reunió unas tres o cuatro veces y después desapareció, sin pena ni gloria. Durante el 2009, el proceso electoral interno derivó en una serie de responsables en distintas áreas que, durante el mismo, sufrió varios y dramáticos cambios.

Al inicio de la Campaña Nacional fue nombrada una Gerente de Campaña (Patricia Pérez) y otro de Estrategia (Roger Retana). El primero coordinaría la acción diaria a través de un Comando de Campaña. El segundo, la estrategia. Desde el inicio, los responsables de Comunicación (Danny Quirós) y de Finanzas (Cristian Arguedas), miembros del Comando, asumieron funciones estrategias. Poco tiempo después la oficina del Candidato empieza a tomar forma y un responsable (Walter Farah( asume la coordinación de su agenda y su participación en actividades específicas.

Para octubre del 2009, existía un Comité de Estrategia (Retana, Quirós y Arguedas), un Comando de Campaña dirigido por la Gerencia de Campaña y una Oficina del Candidato.

Entre noviembre y diciembre fue dstituido el responsable de agenda (giras y eventos) de la oficina del candidato. La Gerente de Campaña (Patricia Pérez) permitió ser desplazada y sustituida por una nueva persona cuya legitimación derivó de vínculos personales con el CP (Debora Formal). Además, desapareció el Comando de Campaña. El Comité de Estrategia asumió el control de la agenda y giras del Candidato y la nueva Gerencia de Campaña, paulatinamente, también asumió funciones meramente operativas que en el pasado, habían correspondido al viejo Comando. Empezó ayudando en actividades de promoción y de signos externos; asumió la coordinación de signos externos, se convirtió en Gerente, coordinadora de transportes, territoriales, electorales y no se sabe que más, pero también, unos pocos días, en las últimas semanas, coordinadora de San José.

Es cierto que la definición y la ejecución de la estrategia es una decisión de pocas personas pero también lo es que depende absolutamente de las funciones típicas que originalmente asumió el Comando de Campaña. Es la conocida relación entre estrategia y táctica, cuestión que puede resolverse organizativamente de múltiples maneras pero que es imprescindible que exista y que funcione. La situación descrita en el apartado anterior revela que, en la campaña, lo fundamental, naufragó por completo.

Conforme la inestabilidad anterior tomaba fuerza, también se fomentaba una mayor concetración de poder y, dado que el Comité de Estrategia asumía el control total pero reducía su ámbito de competencias al candidato, la comunicación y la búsqueda de recursos financieros, la campaña en su conjunto perdió el rumbo y se fracturó por completo. Al desaparecer ese vínculo, llegado el día de las elecciones, el partido tuvo, no una, sino múltiples campañas, sobreviviendo entre sí, con recursos desiguales, en algunos casos en conflicto permanente.

La situación se agravó, por un lado, por la propia elección de las personas que paulatinamente tomaron el control total de la campaña. Por otro, es cierto que la comunicación es estratégica en cualquier campaña pero también lo es que la estrategia no se reduce a la comunicación. En tercer término, en general, la ejecución de las tareas asociadas al Comando de Campaña, al inicio, fue deficiente y, al final, muy deficiente. Pero todas ellas y otras, merecen un desarrollo posterior.

Lo que si es cierto es que el CP o no sabía en qué consistía la estrategia y la táctica o, no supo de su importancia o, pudo ser, tuviera otros propósitos, donde la campaña y el partido solo fueron parte de ellos. La única manera de saberlo es que el CP, en su condición de Presidente del Partido, solicite u ofrezca los informes respectivos. Pero conociendo los antecedentes y el presente inmediato, me temo que ello no ocurrirá.

lunes, 30 de junio de 2008

Niñez y Adolescencia: una visión liberal

Walter Farah,
30 de junio, 2008

El Movimiento Libertario es liberal; es decir, un partido que descansa en una filosofía que considera a la libertad individual como su fundamento esencial. Al asumir este principio, ciertamente el liberalismo conduce al individualismo, es decir, al respeto absoluto a la expresión de cada quien. La libre expresión conduce a la creatividad y ella al optimismo. Un liberal, por ese motivo, rechaza toda forma de pesimismo.
Transformar la libertad individual en el eje básico conduce necesariamente a la diversidad, al respeto a la diversidad. Ser liberal no implica ninguna receta. No hay manera de justificar, desde nuestra ideología, cualquier pretensión de transformar los valores de cada quien en los valores de todos. No perseguimos ningún destino. No patentamos ninguna elección como única y exclusiva. No transformamos los valores individuales en valores universales. Nuestra universalidad descansa, paradójicamente, en la individualidad.
Los liberales somos eso, liberales. No somos cristianos a pesar que los cristianos encuentran un espacio en nuestro partido. No somos agnósticos a pesar que los agnósticos encuentran un espacio en nuestro partido. Y lo mismo puede decirse de toda diversidad, incluso la sexual.
Como consecuencia, no hay mayor ofensa para un liberal, que la intromisión del Estado en la vida de los individuos. Cada quien, desde sus propios valores, construye sus éxitos y fracasos, sin necesidad que una autoridad, cualquiera que sea, nos defina si son correctos o no. Para un liberal los fracasos no son un buen argumento para justificar intromisiones; al contrario, son punto de partida para volver a empezar.
Si lo anterior es cierto, entonces, a propósito de niños y adolescentes, los liberales nos dirigimos, no al Estado, sino a la familia y a la educación como instrumentos forjadores de valores y conocimientos. ¿A cuál familia? ¿A cuál educación? A ninguna en particular. Si la libertad individual conduce a la diversidad individual, la diversidad individual conduce a la diversidad de familias y a la diversidad de procesos educativos. Que los liberales no aceptemos que un modelo particular de familia se convierta en receta para todos, conduce a una única conclusión: los liberales consideramos que es la familia, todas las familias, el eje fundamental de todo debate sobre niñez y adolescencia.

Es cierto que familia quiere decir, en una primera aproximación, lazos de parentesco pero, ciertamente, sobre todas las cosas, para un liberal, la familia descansa en el amor. En realidad, más que un grupo parental, la familia es un núcleo de amor libremente elegido.

¿Qué tiene que ver esto con niños y adolescentes? Todo. El camino más rápido para una conclusión es decir: dado que todas las familias son legítimas, en consecuencia, no hay manera de pretender que los niños y adolescentes sean pretendidamente uniformados bajo unas pretendidas normas universales. Para nosotros, lo importante es que el niño nazca y se desarrolle en un ambiente que propicie su libertad, su creatividad, el optimismo ante la construcción de su vida, que desarrolle sus potencialidades, que se manifieste, con orgullo, diferente, único, especial,

domingo, 1 de julio de 2007

Apuntes Liberales

25 de mayo, 2007

Los costarricenses somos liberales

No es extraño que muchas personas confundan “liberalismo” con “neoliberalismo”, creyendo que ambas son diferentes caras de la misma moneda. Nada más equivocado. El “neoliberalismo” está asociado a un conjunto de políticas públicas que dominan el escenario latinoamericano a partir de los años ochentas, cuya principal característica es su “mercantilización, es decir, su promoción y aplicación para favorecer a unos u otros sectores, en detrimento de los demás.

El liberalismo, por el contrario, es una filosofía cuya preocupación principal es “la naturaleza y límites del poder que puede ser ejercido legítimamente por la sociedad sobre el individuo” En 1859, John Stuart Mill, inglés, publicó la obra “Sobre la Libertad”, cuyo propósito principal fue “proclamar un principio muy sencillo encaminado a regir de modo absoluto la conducta de la sociedad en relación con el individuo”.

Ese principio es el siguiente: “El único objeto que autoriza a los hombres, individual o colectivamente, a turbar la libertad de acción de cualquiera de sus semejantes, es la propia defensa; la única razón legítima para usar de la fuerza contra un miembro de una comunidad civilizada es la de impedirle perjudicar a otros; pero el bien de este individuo sea físico, sea moral, no es razón suficiente”. Otras formas de plantearlo son las siguientes: “Sobre sí mismo, sobre su cuerpo y su espíritu, el individuo es soberano”. “Cada cual es el mejor guardián de su propia salud, sea física, mental o espiritual” “La especie humana ganará más en dejar a cada que viva como le guste más, que no obligarle a vivir como guste al resto de sus semejantes”

Resulta evidente que cualquier acción de una persona puede llegar a perjudicar a otra. Por esa razón, en términos prácticos, el problema siempre reside en determinar cuando es necesario aceptar restricciones a la esfera individual en beneficio de la colectividad, lo que quiere decir que el debate entre individuo y sociedad es permanente pero cambiante.

Aún así, señala Stuart Mil, existe un conjunto de conductas que no afectan más que al propio individuo: la libertad de conciencia, la libertad de pensar y de sentir, la libertad de opiniones y de sentimientos, la libertad de expresar y publicar las opiniones, la libertad de gustos y de inclinaciones, la libertad de organizar nuestra vida siguiendo nuestro modo de ser y la libertad de asociarnos.

“No se puede llamar libre a una sociedad, cualquiera que sea la forma de gobierno, si éstas libertades no son respetadas, y ninguna será completamente libre si estas libertades no existen en ella de una manera absoluta y sin reservas. La única libertad que merece este nombre es la de buscar nuestro propio bien a nuestra propia manera, en tanto que no intentemos privar de sus bienes a otros o frenar sus esfuerzos para obtenerla…”

Gracias a la influencia liberal, la historia constitucional de nuestro país ha garantizado tales libertades desde fines del siglo XIX, por lo que a ningún costarricense le son extrañas, a pesar de las tentaciones autoritarias que resurgen periódicamente. En lo personal, cada vez que escucho el argumento de la necesidad de una Constituyente, tiendo a manifestarme en contra, dado el peligro que a alguien o a varios, que podrían ser mayoría, se les ocurra que es necesario eliminar, reformar o modernizar tales principios.

La vigencia del liberalismo, al menos en Costa Rica, no proviene de coyuntura alguna sino de nuestra propia historia, nuestras propias decisiones, nuestros errores y aciertos acumulados. Es por esa razón que podemos afirmar que los costarricenses somos liberales de inicio a fin, aunque no lo sepamos y sin que, necesariamente, hagamos uso responsable de sus principios.

Los liberales somos rebeldes

Uno de los prejuicios más extendidos sobre los liberales es nuestra supuesta asociación con lo establecido, cual si fuéramos alguna especie de conservadores de viejo o nuevo cuño. Nada más falso, dado que nuestro punto de partida, la libertad individual, por definición, nos lo impide, convirtiéndonos en fervientes amantes de la rebeldía. Una de las formas más hermosas de plantearlo se encuentra en el Capítulo III, de la obra de Stuart Mill, “Sobre la Libertad”, titulado “De la Individualidad como uno de los elementos del bienestar”.

Es curioso que casi todas las personas admitan la tesis de la libertad de conciencia y expresión, pero sean más precavidas para aceptar esa misma libertad en la conducta propia y de sus semejantes; algo así como aceptar el desarrollo de la inteligencia y el raciocinio pero frenar los deseos y los impulsos de cada quien, obviando que “un ser humano que no tenga ni deseos ni impulsos no posee más carácter que una máquina de vapor”.

Pero de la misma manera que es útil la diversidad de opiniones y expresiones también resulta conveniente “que se abra campo al desarrollo de la diversidad de carácter…siempre que no suponga daño a los demás”. En otras palabras, “es deseable que, en los asuntos que no conciernen primariamente a los demás, sea afirmada la individualidad. Donde la regla de conducta no sea el carácter personal, sino las tradiciones o las costumbres de otros, allí faltará completamente uno de los principales ingredientes del bienestar humano y el ingrediente más importante, sin duda, del progreso individual y social”

Algunas personas tienen temor que los deseos y los impulsos de las personas se expresen libremente, porque consideran que producirán anarquía, malos ejemplos o sinónimos similares. Olvidan, quienes asumen tal conservadurismo, que las “mismas fuertes susceptibilidades que hacen vivos y poderosos los impulsos personales son también la fuente del más apasionado amor de la virtud, del más estricto dominio de uno mismo. Cultivándolas, la sociedad cumple con su deber y protege sus intereses; no lo cumple cuando desecha la madera con que se hacen los héroes”.

Los liberales somos rebeldes porque entendemos que no hay razón alguna para paralizarse por lo establecido, la costumbre o el “que dirán”. Somos rebeldes porque confiamos plenamente en el ejercicio de todas las facultades individuales que inevitablemente romperán con los esquemas preestablecidos, las ideas petrificadas, los aparentes límites, las costumbres, buenas o malas. De hecho, el único término posible lo dicta las propias capacidades de cada quien y la sociedad está obligada a favorecerlas, si desea continuar por la senda de su desarrollo, sin que conozca el peligro de su desaparición o, simplemente, su desaparición.

“El hombre que permita al mundo, o al menos a su mundo, elegir por él su plan de vida, no tiene más necesidad que de la facultad de imitación de los simios. Pero aquel que lo escoge por sí mismo pone en juego todas sus facultades. Debe emplear la observación para ver, el raciocinio y el juicio para prever, la actividad para reunir los elementos de la decisión, el discernimiento para decidir, y, una vez que haya decidido, la firmeza y el dominio de sí mismo para mantenerse en su ya deliberada decisión. Y cuanto mayor sea la porción de su conducta que determina según sus sentimientos y su juicio propios, tanto más necesarias le serán estas diversas cualidades”

En síntesis, la “individualidad es la misma cosa que desenvolvimiento y solamente el cultivo de la individualidad produce o puede producir seres humanos bien desarrollados”, es decir, rebeldes para siempre.

Matices sobre los apuntes liberales

3 de junio, 2007

A propósito de la columna anterior, "Apuntes Liberales", recibí correos-e de personas que me hicieron observaciones críticas y comentarios de apoyo. Don Jorge Eduardo Cartín escribió: "...yo siempre creí ser socialcristiano y hay mucho de esa doctrina que me apasiona pero el conocer la doctrina liberal o mejor dicho irla conociendo sin miedos ni creencias cegantes que nos han hecho verla como la peor de todas las doctrinas políticas me ha identificado con mi parte liberal y mi perspectiva del individualismo criticado por todoas las doctrinas politicas ha sido modificado!..."

Don Gonzalo Rodríguez: "Afortunadamente, la mayoría de los costarricenses somos liberales y me parece que una de las características esenciales del liberalismo es que es reformista. Quizás por eso se piensa, yo diría con cierta ligereza que los liberales tendemos a privilegiar el statu quo, “lo establecido”. En realidad lo que sucede es que tendemos a alejarnos de la utopía, tenemos los pies muy bien puestos en el suelo. Reconocemos que las sociedades progresan, cambian, sufren modificaciones, pero éstas últimas no deben ser el producto de reacciones o rebeliones, sino más bien el producto de grandes pactos. La idea de estos pactos no nace en la colectividad, nace como apunta el filósofo español Ortega y Gasset, 'en mentes selectas, individuos críticos y sobre todo libres, cuyo pensamiento es capas de orientar a las masas. Yo creo en la colectividad, pero en la que se funda a partir de la libertad del individuo".

Doña Marina Volio: "Me he dedicado, desde 1986, a estudiar documentos originales de la Costa Rica que se va a crear con el primer Congreso Constituyente de 1824. Coincido en que a lo largo de toda nuestra historia hemos sido liberales, no autocráticos ni dictatoriales. Prueba de ello es que en los momentos que se ha presentado esa coyuntura levantamos nuevamente la bandera de la libertad"

Tal como lo señala don Jorge, el liberalismo está rodeado de prejuiciosos miedos o "creencias cegantes" que impiden el debate racional sobre sus principales tesis.. Por ese motivo, uno de los compromisos más fuertes de todo liberal es abordar y fomentar las conversaciones y diálogos de forma racional, que no garantiza posterior coincidencia o discrepancia con nuestro interlocutor, pero sí inteligencia, seriedad, consecuencia, transparencia, claridad y precisión, valores importantes en todo liberal. Ahora bien, al menos en nuestro entorno cultural -tan dado al "nadadito de perro" y al "ton ni son", ese estilo puede parecer, a veces, "duro" o "intransigente", dependiendo de las personas y los contextos. Pero de una u otra manera, a pesar de los prejuicios de otros y las características propias, los liberales nos esforzamos por permanecer en aquellos valores y, de esa manera, fortalecer el debate de ideas, no de prejuicios, en una sociedad como la nuestra que, a pesar de su propia historia, hoy privilegia las falacias de todo tipo.

Un ejemplo puede servir. Como se sabe, los libertarios siempre fuímos críticos de las distintas versiones de los proyectos, de la hoy Ley de Penalización de la Violencia contra las Mujeres, entre otros motivos, argumentando que es inaceptable que si un esposo mata a su esposa, reciba una pena mayor que si una esposa mata a su esposo, generando una desigualdad que, para nosotros, por principio, es inaceptable ¿Eso quiere decir que los liberales no conocemos del problema de la violencia contra la mujer o no entendemos la necesidad de atenderlo? No. Lo único que quiere decir es que sostenemos que un problema de género, en lo fundamental, es un problema cultural y que crear diferencias, derivadas del sexo de las personas, para atender un problema cultural, es reduccionista y culmina, necesariamente, en una desigualdad, es decir, paradójicamente, reproduciendo la desigualdad en el intento por corregirla. Sostener esa posición, en medio de un discurso falsamente emotivo, calculador y politiquero, en efecto, puede parecer, a unas personas, duro e intransigente pero, como ya mencionamos, ése, es otro tipo de problema.

Durante las diversas legislaturas que esa inciativa estuvo en la Asamblea Legislativa, los diputados libertarios siempre plantearon alternativas para favorecer otro tipo de solución. En el último episodio, en mayo pasado, cuando finalmente llegó a votarse el último texto, los diputados libertarios lo único que solicitaron, al resto de partidos políticos y al propio Gobierno, fue su apoyo para consultarlo, previamente, a la Sala Constitucional. No fue posible. De esa manera, finalmente, la racionalidad dió paso definitivo a los discursos vehementes, dramáticos y de compromiso, sin importar seriedad o consecuencia. Por supuesto que el liberalismo es afectado por los prejuicios, pero nunca renunciaremos a nuestros principios para "acomodarnos" a las circunstancias. Al contrario, seremos fieles a ellos porque de esa manera, además, ejemplo mediante, entendemos que también colaboramos para renovar la cultura política costarricense, un propósito que todos, no solo nosotros, debiéramos asumir.

Sobre la diferenciación entre liberalismo y neoliberalismo, recibí dos correos. El primero, de don Melvin Garita: "...Solo una observación, el concepto de neoliberalismo tiene distintos significados y orígenes, este aspecto es muy bien abordado en el ensayo “El mito del neoliberalismo”, de Enrique Ghersi, tal vez a lo que usted se quería referir está relacionado con lo escrito por Ghersi: “En el caso del “neoliberalismo”, lo que sucede es que se quiere asimilar con el liberalismo algunas políticas o ideas en particular que aisladamente podrían ser compatibles con él, pero también con cualquier otra cosa, sugiriendo una identidad inexistente. Se trataría entonces de lo que en teoría se denomina una sinécdoque particularizante: se quiere presentar partes del liberalismo como si fuera el todo.”. Solo para recordar a Friedman en alusión a Sobre la Libertad: ‘La declaración más concisa y clara del principio liberal fundamental, “el único propósito por el cual el poder puede ejercitarse correctamente sobre cualquier miembro de una comunidad civilizada, contra su voluntad, es para prevenir el daño a los demás...” ‘

El segundo correo, de don Helio Fallas: "Aunque las fuentes del liberalismo y neoliberalismo son distintas se encuentran. El liberalismo como expones se enmarca en una doctrina política mientras que el neoliberalismo es una corriente de pensamiento económico basada en la libertad de los mercados y en el reducir el tamaña del estado aunque existan fuerzas muy desiguales en la sociedad. Por ello es muy común ver cómo los llamados "liberales" apoyan muchas o la mayoría de las medidas neoliberales".

Admitamos que, con relación al mercado, el liberalismo, como política económica, apoya y favorece su libertad y la reducción del papel del aparato estatal. Pero eso no implica que la política económica liberal coincida con el "neoliberalismo". Al contrario, los liberales somos hipercríticos de la forma que, durante los años ochentas, noventas y hoy, se impulsaron e impulsan políticas, en apariencia, favorables al libre mercado y reducción estatal, pero que no son más que variaciones del acostumbrado proteccionismo histórico.

Por ejemplo, permanentemente denunciamos el doble discurso de los distintos gobiernos que hablan en defensa del libre comercio pero que, sin rubor alguno, defienden monopolios internos privados, usualmente relacionados con pocos nombres y apellidos, como el azúcar y arroz. Causa molestia escuchar argumentos que defienden esos monopolios, en términos de protección al productor nacional contra la salvaje competencia internacional, cuando es conocido que los únicos favorecidos son esos pocos, en prejuicio de todos los consumidores. Dado que reconocemos que los principios de igualdad en el mercado abierto no están asegurados entre los que ofrecen y compran, enfatizamos la importancia y defensa del consumidor, siendo éste uno de los ejes que, necesariamente, también forma parte de una política económica liberal. En la defensa del consumidor es probable que coincidamos con otras fuerzas pero, a diferencia de la experiencia acumulada desde que se aprobó, en nuestro país, la normativa de libre competencia y defensa efectiva del consumidor, la política económica de un gobierno liberal incluiría pasos efectivos, rápidos y decisivos que tiendan a empoderar al consumidor y sus organizaciones, diferenciándose de la burocratización en que ha terminado la defensa del consumidor, bajo el ejercicio de gobiernos neoliberales.

Podría afirmarse que, a pesar de la defensa del consumidor que hacen los liberales, su política económica y la del neoliberalismo siempre se encuentran, puesto que ambos favorecen el libre comercio y la disminución estatal "aunque existan fuerzas muy desiguales en la sociedad". Es falso que el neoliberalismo farorezca la disminución del aparato estatal. Al contrario, al revisarse el detalle de las políticas promovidas por los partidos tradicionales, los recursos públicos disponibles y los resultados obtenidos, la política eeconómica neoliberal no ha disminuido el aparato estatal, en muchos casos ha incrementado el gasto y ha sido poco eficiente en la obtención de los resultados Nuevamente, fiel a su espíritu, el eje principal que explica por qué los neoliberales fluctúan, disminuyendo o aumentando el aparato estatal según sea el caso, es su mercantilización, es decir, su permanente interés de proteger a unos, pero no a todos. No es casualidad que la corrupción sea otro de los fenómenos que acompaña al neoliberalismo.

Los liberales, por el contrario, creemos que, sí o sí, el aparato estatal debe disminuir su tamaño y aumentar su eficacia y eficiencia y consideramos pocos serios los argumentos que defienden una institución pública, solo por el objetivo, elevado a principio divino, encomendado en su ley, independientemente de sus resultados. Un buen ejemplo, entre otros, es la enorme cantidad de instituciones que han atendido y atienden el problema de la pobreza y de recursos con que han contado y cuentan, solo para comprobar que la pobreza se ha incrementado y que, después de treinta años, aún ni niquiera sepamos quienes son esos pobres, a pesar que de una frontera a otra, no duramos más que unas pocas horas en hacer el recorrido.

En ese caso, nuestra visión de restringuir la presencia de los aparatos estatales en la vida nacional, ni siquiera tendría que fundarse en principios. Basta la verguenza ajena para entender que la atención de la pobreza debe ser abordada de otra manera, a pesar de los especialistas y la burocracia. Tampoco compartimos el argumento que señala que las instituciones públicas no deben disminuir porque afecta el empleo público, dado que el propósito de la política pública que animó la creación de las instituciones que atienden la pobreza, fue el de resolver ese problema, no aquel. Es cierto que la reestructuración del sector público genera dificultades a las personas que son afectadas, pero ese es un problema diferente que debe enfrentarse en su propia especificidad. Es común escuchar el argumento que los libertarios carecemos de sensibilidad y propuestas referidas a "lo social". Eso es falso y, más bien, hoy hacemos un esfuerzo por abordar activamente estos temas y tomar una actitud más agresiva en la denuncia y presentación de propuestas. El caso de vivienda es un buen ejemplo. Mientras que el ministro se va a dormir una noche en un precario, el análisis de su política de vivienda, es decir, en lo que debiera estar, revela inconsistencias, falsedades y pocos resultados, es decir, la conducta neoliberal de siempre..Por otra parte, mientras que partidos, como el PAC, que tienen un discurso, afirman ellos, en favor de "lo social", cualquier cosa que eso signifque, al mismo tiempo es notoria su ausencia, al menos, en el control político de las personas, programas y resultados de las instituciones que, de paso también defienden, a pesar de sus pésimos resultados. Paradójicamente, fuímos los libertarios, es decir aquellos que, supuesta y prejuiciosamente, carecemos de sensibilidad y política social, los que hemos denunciado, recientemente, la situación vigente en el BANVHI, su ineficiencia y despilfarro.

Dado que, en términos históricos, el neoliberalismo, en Costa Rica, es hijo de los dos partidos tradicionales, puede afirmarse que la política económica de los gobiernos de liberación y unidad es una política neoliberal que, como sabemos, ha incrementado la pobreza, el dolor humano y ha terminado por dificultar las oportunidades que las personas deben contar para su desarrollo. Coincidimos con don Helio en reconocer que "existen fuerzas muy desiguales en la sociedad", pero no creemos que ese argumento puede utlizarse para justificar la intervención estatal en el mercado o para su participación, mediante instituciones, para equilibrar esa desigualdad. De inicio, a lo sumo, lo único que podría afirmarse es que, en determinadas condiciones, esa intervención y participación podría coadyuvar a ese propósito, pero no necesariamente, como lo demuestra nuestra propia historia. De hecho, dada la experiencia empírica, podría perfectamente justificarse la tesis contraria. La participación e intervención del estado profundiza las desigualdades.

domingo, 4 de febrero de 2007

A Propósito de Democracias

Ahora resulta que la democracia es buena en Venezuela, pero mala en Costa Rica. Ahora resulta que, en el Parlamento, está prohibido sumar si no es de cierta manera. Ahora resulta que la incapacidad parlamentaria se traduce en adiós a la democracia. Ahora resulta que el mesianismo olvidado resurge nuevamente con sus garras afiladas, en medio de una ingenuidad que uno no sabe si ponerse a llorar o dejar que pasen los días; a final de cuentas, al menos, uno sabe a que atenerse. Esa es la desventaja de creer que la democracia está para algo más que quitar, periódicamente, a los gobernantes. Ese es el problema de ponerle apellidos a algo que solo se le conoce como tal, democracia, que no es sino el mecanismo menos malo que los seres humanos hemos encontrado, para garantizar que quienes nos gobiernan no se petrifiquen en el poder, para que no nos petrifiquen a nosotros, a usted y a mi.

Entre quienes confunden lo inconfundible, hay unos vivillos. Son nuestros “intelectuales progresistas”. Casi ninguno de ellos ha dejado de estirar la mano de los “políticos” y han pertenecido a los círculos de influencia del poder, cuando no, directamente, han ejercido cargos públicos, en nombre de esos “políticos”. Y ahora resulta que son “críticos” de las sumas y restas del escenario político. Con ellos, en medio de su propia ignorancia, llena de doctorados y articulitos de revistas, no cabe hacer nada, salvo desnudarlos en su hipocresía.

Hay también quienes se consideran responsables por el mundo. Cargan en sus hombros el fardo de la humanidad. Se consideran salvadores; herederos de una extirpe redentora. Desde su divinidad proclaman la verdad y la falsedad. Lo correcto de lo incorrecto. Lo justo, lo injusto. No son dioses, es cierto, pero se miran al espejo como tales. Su punto de partida es la filosofía de la historia, tan engañosa como peligrosa. Peligrosa, porque creyendo que salvan a la humanidad, terminan con unos y otros, todo sea en nombre de los unos y los otros.

Y, por supuesto, están los ingenuos, peligrosamente inconcientes de sus propias contradicciones, como el Partido Acción Ciudadana, líder y fracción legislativa incluidos. El primero acude, nuevamente, a Estados Unidos. Y ya que, desde hace mucho tiempo, de otra visita suya, se sabía que el TLC no podía renegociarse, ahora nos trae una buena nueva: Estados Unidos no nos quitará los beneficios derivados de la Iniciativa del Caribe, si no aprobamos el TLC. Y sus acólitos celebran ¿Celebrar qué? ¿Qué nuestra política comercial seguirá dependiendo de amigos, de unos y otros, en Washington, si no aprobamos el Tratado? ¿Y si los amigos cambian de opinión? ¿Y cuándo mueran los amigos?

Pero que importa abandonar el debate serio si, a final de cuentas el interés era otro; ocupar la primera plana de los medios ayudando, conciente o no, en el desarrollo de una estrategia peligrosa que solo algunos pocos la saben e implementan. La visita de Ottón Solís no cambia en nada el debate sobre el contenido del TLC, excepto que refuerza la necesidad de ratificarlo. Pero no basta aparentar seriedad, hay que serlo.

Se sabe que los libertarios utilizamos todos los procedimientos legales a favor o en contra de nuestras tesis. Nunca pretendemos, ni aspiramos, ni siquiera se nos ocurre, ir más allá de esos procedimientos. A veces ganamos, a veces perdemos. Se nos conoce por nuestro conocimiento y disciplina en el uso de los procedimientos legislativos. La lucha de la fracción anterior contra el incremento de los impuestos así lo demuestra. De paso, transcurren los años y la historia nos ha terminado de dar la razón sobre este tema y no vemos por ningún lado a nuestros viejos críticos; mejor así: calladitos, enfrentados con sus propias mentiras.

Somos firmes y consecuentes en nuestras posiciones y firmes y consecuentes en el uso de los procedimientos legislativos. Nada parecido a lo que se constata diariamente en la gestión de la fracción legislativa del PAC ¿Si es cierto que se oponen al TLC, por qué entonces no han utilizado el reglamento legislativo como correspondería? ¿Por qué ese gallo-gallina, confuso y peligroso de utilizar a medias los procedimientos parlamentarios?

En cualquier caso, si la inoperancia e incapacidad llegara hasta ahí, no habría problema alguno. El inconveniente es que, al mismo tiempo, en medio de sus propios gatuperios legislativos, salen a la calle y terminan sumando con algunos de no muy buenas intenciones. Debilidad y confusión en la estrategia; virginidad y castidad en la política de quienes se espera una mayor responsabilidad parlamentaria y bajo nivel en la asesoría legislativa, entre otros, pueden terminar por explicarlo todo.

Si realmente se cree en ésta, la democracia, la menos mala de todas las formas de gobierno, entonces asumamos las consecuencias de los juegos que le son propios. A veces se pierde; a veces se gana. Sin mayor tragedia que el trago amargo de saberse minoría en febrero del 2007, cuando en febrero del 2006, se autoproclamaban mayoría.